Cogí las plumas y me apresuré a salir corriendo, Burney me echó una cuerda para ayudarme a subir y comencé a trepar pero de repente noté como algo pasaba por mi lado, era una bala y ya sabéis, donde hay una bala está ella. Si, la agente Lucy Fox, tan guapa y desafiante como siempre.
- ¡Alto ladrón! - Dijo esperando a que me detuviese.
- Señorita Fox me gustaría cumplir sus deseos de tener al chico más atractivo de París obedeciéndole pero da la casualidad de que soy ladrón y a los ladrones eso de hacer caso a una agente del P.I.C pues como que no nos va, hasta la próxima! - Dije mientras subía la cuerda.
- ¿Crees que vas a escapar? - Parecía tranquila y segura de lo que decía - Suerte allí arriba.
Cuando subí estaba Ingrad para detenerme, lo que no sabía la agente Fox es que su nueva compañera y yo ya habíamos hecho buenas migas juntos. Burney estaba atado a una farola, cosa que no supondría mucho esfuerzo para él a la hora de escapar, decidí salir corriendo por París y así ellos tendrían tiempo de preparar la huida.
- Corre James, yo ayudaré a tus amigos.
- Gracias Ingrad pero ... ¿no deberías detenerme?
- Yo sola no puedo con la banda Throw, alguien me tendrá que ayudar ¿no?
- Entiendo, hoy por mi, mañana por ti ¿cierto?
- Así es, ¡ahora corre! ¡Nos vemos James!
En ese instante salio Lucy del agujero y me disparó pero bueno...no es que tenga muy buena puntería...
- ¿Pero que haces inútil? Estás dejando escapar al ladrón con lo que el quería. - le reprochó Lucy a Ingrad.
- ¿Yo? Te recuerdo que tu le dejaste salir de ahí y además a ti te vuelve loca correr detrás de él, ¿me equivoco?
- Ya me encargaré de ti mas tarde ¡INCOMPETENTE! Vigila al gorila este.
- Como quieras...
Mientras tanto yo buscaba un buen sitio para esconderme mientras ellos dos preparaban la furgoneta, la noche se había calmado, sólo había silencio, me senté en el tejado y me puse a contemplar la Luna, estaba preciosa esta noche, ni una nube, eramos la luz de la Luna, ese silencio y yo solos en la noche. De repente oí como alguien preparaba una pistola, pegué un salto y la bala pasó por debajo de mi, era ella (que sorpresa) la agente Lucy Fox.
- ¡Ey casi me das!
- Esa era mi intención, por fin te tengo.
- Así es, por fin me tienes.
- ¿Te vas a entregar así de fácil?
- Claro que no, sabes a que me refiero Lucy
- No...no te entiendo yo solo quiero arrestarte.
- Ven siéntate, hace una noche casi tan preciosa como tú, relájate y disfruta de las vistas, esta noche París es nuestra.
- Pero tengo que arrestarte.
-Ya tienes a Dinio, es un criminal muy buscado, que avariciosa eres, quieres a dos ladrones en una misma noche...déjate algo para otro día ¿no?
- Bueno, tienes razón. Dime una cosa, ¿que pretendes hacer ahora?
- Restablecer mi honor, mi orgullo es lo que me mueve ahora y esta banda es mi objetivo.
- ¿Entonces no fuiste tú el que robó las piezas?
- Quizá debas escuchar más a tu nueva compañera, parece incluso inteligente - Vi que mi busca me daba la señal para irme y decidí marcharme.
- No creo que ella sepa todo lo que pasa, es extraño, es como si supiese algo que no se yo, se anticipa a todo.
- Ey Lucy no te ralles por chorradas, es una buena chica...por cierto, ¿aquella no es la Superintendente?
- ¿QUÉ? ¿la marquesa? ¿dónde? - desaparecí dejando mi tarjetita de ladrón profesional - no hay nadie, ¿James? ¿Cómo es posible? ¡Maldito ladrón! ¡Juro que no volverás a escapar de mi!
CONTINUARÁ
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