martes, 22 de julio de 2014

Capítulo 8 - El rugir de las profundidades.

Rodeados por las tropas de Khazan y con el general Zazuki en frente poco podíamos hacer para escapar. En ese momento estábamos atrapados, sólo un milagro podía salvarnos. Parecía que todo estaba perdido cuando de repente oímos un fuerte estruendo como un rugir de las profundidades, era él, ¡nuestro salvador! Burney venía como una moto hacía nosotros con la manada de elefantes que habíamos dejado dormidos y por sus apariencias parecían estar perfectamente y con ganas de zurrar a todos estos tipejos.

Burney lo había conseguido, irrumpió en la plaza con cinco elefantes que se llevaron por delante a todas las tropas de Khazan, menos a uno, el general Zazuki.

No podíamos dejarlo vivo o sino Khazan se enteraría de todo y nuestro plan habría fracasado. Salí detrás de él para detenerlo, conseguí desviarme por un atajo y le salté en sus "narices". Lo tenía acorralado, no le quedaba otra opción que enfrentarse a mi.

- ¿Qué demonios estás buscando tú aquí James?

- ¿Me conoces? No sabía que en la India tuviera fans.

- Claro que te conozco, como iba a olvidar al pequeño Kayne XX.

- Espera...¿tú eres Brent?

- Así es, soy Brent Jr

- No lo entiendo, ¿por qué apareces ahora? ¿por qué con Khazan?

Brent fue un amigo de mi padre, él junto a  Philips y mi padre lograron uno de los mayores botines del mundo, hasta que aquel fatídico día nos quedamos todos encerrados en la cámara de mi familia y bueno...ellos murieron...o eso creía...

- Es una larga historia James.

- Creía que habías muerto con todos en aquella cámara.

- No te atormentes por el pasado, aquello sucedió y no podemos cambiar nada.

- Pero, ¿y los demás? Pensaba que habíais muerto todos.

- No es del todo cierto, a los ojos de todo el mundo tu familia entera murió y tú también, por eso la P.I.C te busca desesperadamente, no quieren que el mundo sepa que un descendiente de los Kayne siga vivo.

- ¿Entonces siguen vivos?

- Con el tiempo sabrás la historia, ahora estamos en bandos diferentes y mi deber es acabar con tu vida.

- ¿De verdad crees que acabando conmigo ahora podrás acabar con mi estirpe?

- Tal vez no con tu estirpe, ¡pero si con el descendiente directo de aquel miserable ladrón!

No entendía nada, ¿miserable ladrón? ¿a caso no eran compañeros?

- ¿Cómo puedes hablar así de un amigo tuyo que lo dio todo por vosotros?

- ¿Todo por nosotros? No tienes ni idea James, tu padre quería largarse de la cámara con todo el botín y dejarnos encerrados allí al resto, incluidos tú y tu familia.

- ¿Por qué iba a hacer eso mi padre?

- Porque el oro cambia al hombre, igual que el amor. Él estaba ciego de amor, es enamoró de una agente de la P.I.C y el muy idiota lo planeó todo para fugarse con ella y hacer que todo pareciese un accidente. Con la cámara destruida la familia James Kayne habría desaparecido y nadie se habría preocupado en investigar sobre los restos de tus antepasados, a los ojos de todo el mundo todos habríamos muerto.

- Pero mi padre también murió.

- Así es, su "prometida" le tendió una trampa, cuando tu padre activó la autodestrucción, su amada le disparó y lo arrojó dentro de la cámara, una vez que no teníamos escapatoria tu padre se abrazó a ti puesto que eras el único que no tenía ni idea acerca de este asunto. La cámara se derrumbó y todos nos quedamos atrapados allí dentro, el botín desapareció en las profundidades y del resto de personas no he sabido nada en estos años, tu padre no fue como tu creías que era, él cambió, por amor, pero cambió. Dejó a su familia y amigos tirados por una mujer que le tendió una trampa y acabó con su vida.

- Mientes, todo es mentira, mi padre no haría eso, sólo son celos tuyos porque tu estabas enamorado de aquella chica también.

- JAMES, NO NIEGUES LO INNEGABLE, ACEPTA LA VERDAD Y DEJA DE CREER EN LA MENTIRA.

- ¡Que te calles maldito bastardo!

Le pegué con todas mis fuerzas con mi bastón en la cara y lo dejé tumbado en el suelo.

- Recuerda estas palabras en la otra vida Brent, mi padre jamás traicionó a NADIE.

Entonces apareció ella parando mi bastón.

- ¿Qué se supone que haces James?

- Ingrad no lo entiendes...él...mi padre...

- Tranquilo James, lo he oído todo, no puedes dejarte llevar por el odio y la rabia, si lo matas ahora Khazan se enterará de todo y tu plan lo habrás echado a perder, déjame que me ocupe de arrestarlo, diré que armó revuelo, cuando todo esto acabe dejaré que hables con él.

- Esta bien, gracias por todo Ingrad, no se que haría sin ti.

- No te preocupes, ahora todo esta solucionado, vete a descansar para el baile.

- ¡¡¡¡JAAAAAAAMES!!!! - Dijo Sheldoon a lo lejos.

- Bueno me voy James, cúidate.

- ¿Qué ha pasado? ¿Te ha hecho algo ese cabrón? Le haré comer papillas hasta el fin de sus días - dijo Burney algo alterado.

-Tranquilos chicos estoy bien, ¿ellos están bien?

- Oh si, perfectamente pero Burney le ha cogido demasiado cariño a uno...

- Bueno, puede sernos útil en un futuro, ¿verdad Burney?

- ¡Claro! Yo siempre pienso antes de actuar.

- Lo que tu digas Burney - dije con un tono irónico.

- Bueno, lo mejor es que vayamos al piso franco a preparar la siguiente misión - dijo Sheldoon

- Vamos, ¡tengo que descansar para mi gran noche!

Mientras nos íbamos apareció una extraña silueta en las sombras. Obviamente no la vimos ni oímos nada.

- Asi que James Kayne eh - dijo desapareciendo en las sombras otra vez.

CONTINUARÁ

No hay comentarios:

Publicar un comentario